Héctor Díaz: «Gracias a persistir, creer y confiar hemos conseguido el objetivo»

El entrenador del Madrid CFF ‘B’ ha valorado con Woso Magazine la temporada

El Madrid CFF ‘B’ se ha proclamado campeón del Grupo Sur de Segunda RFEF y con ello ha conseguido el ansiado ascenso a Primera RFEF, donde militará la próxima campaña.

El capitán del barco ha sido Héctor Díaz, quién cogió las riendas el pasado verano tras el descenso del conjunto madrileño con el objetivo de devolver al equipo a la Segunda División. Con el bagaje de 22 victorias, 3 empates y 5 derrotas, el sueño de volver se hizo realidad.

P: ¿Qué valoración hace de la temporada?

La mayor definición de esta temporada es que estoy muy orgulloso de todas mis jugadoras y de todo mi cuerpo técnico.

A nivel personal ha sido una temporada increíble, incluyendo todo lo bueno y todo lo malo que ha pasado durante la temporada.  Empezamos un proyecto difícil por la reconstrucción que hubo que hacer del equipo con mucho trabajo por parte de todos los estamentos del club y porque era difícil devolver al equipo a la categoría en la que estaba.  A mi me gusta trabajar mucho para que luego puedan o no llegar las recompensas, este caso han llegado.

A nivel grupal había que adaptarse a la nueva categoría que, aunque viniésemos de Reto Iberdrola era una categoría nueva.  Tanto con las jugadoras como con cuerpo técnico han puesto las cosas fáciles. A nivel de levantarnos, de seguir luchando ha sido increíble. Las chicas salían al campo a dejarse la piel y han tenido una constancia muy grande para poder llegar a este resultado y el cuerpo técnico ha luchado también con uñas y dientes. La actitud de ambos cuando yo no he podido estar en el banquillo ha sido abismal.  

P: ¿Cómo fue el momento donde le llega la llamada del club?

El Madrid CFF me contactó cuando finalizó la pasada temporada. El club había descendido de categoría y me llamaron porque pensaban que por toda mi trayectoria era la persona que podría devolver al equipo a la segunda categoría del fútbol femenino nacional.

Fueron meses bastante difíciles porque debido al descenso del equipo la mayoría de las jugadoras se marcharon.

P: Llegó a un equipo recién descendido, con muchas caras nuevas, ¿Cómo fueron esos primeros meses de adaptación?

Fueron bastante difíciles porque debido al descenso del equipo la mayoría de las jugadoras se marcharon. Se quedó un bloque de jugadoras de la casa y a partir de ello teníamos que construir el nuevo proyecto para luchar en la Segunda RFEF esta temporada y conseguir el objetivo.

Hubo un mes muy duro donde tuvimos que estar en contacto con muchas jugadoras, representantes, clubes, etc, pero según se iba confeccionando me iba gustando cada vez más todo el grupo que estábamos formando.

Me lo pusieron fácil en el club. Tengo que agradecer mucho todo lo que han hecho la gente del club por mí, desde el primer día el trato ha sido muy bueno, muy familiar y eso junto con mi forma de ser  que siempre estoy dispuesto a ayudar y a conocer gente ha hecho que haya sido todo muy cómodo.

P: En mitad de la temporada le llegó esa responsabilidad de dirigir el primer equipo en la Liga F y en la Copa de la Reina, ¿Cómo afrontó ese momento?

Fue de repente. Se dieron una serie de circunstancias en la que el club tenía que buscar una solución de hoy para mañana, contaron conmigo, me dieron la confianza para estar el tiempo mientras el club encontraba una solución. Fue una oportunidad preciosa el poder vivir esa experiencia, estoy contento, a pesar de tener la espinita clavada porque los tres encuentros fueron con derrota, por poder ayudar tanto al club como al cuerpo técnico y jugadora durante esas dos semanas.

Estoy muy agradecido al club, aunque no pude conseguir una victoria, pero voy a seguir trabajando para seguir creciendo poco a poco y que en el futuro me pueda llegar esa victoria en Primera División. Yo tenía un proyecto muy bonito con el B y la mejor opción era que yo siguiera con el equipo para conseguir el objetivo y por eso fue algo temporal.

P: Se ha visto a un equipo muy regular, pero ha habido tramos en la temporada donde parecía que al equipo le costaba más el puntuar, ¿Cuál ha sido el aprendizaje que les han dejado esos empates o derrotas durante la temporada?

La lección más importante es que siempre hay que PERSISTIR hasta el último momento.  Lo llevo grabado a fuego dentro de mí y en un club humilde como es el Madrid CFF se lleva también grabado dentro. Al final el equipo está ahí gracias al trabajo y al sacrificio tan grande que hace que el primer equipo esta temporada por ejemplo haya estado a la altura de los equipos más grandes.

Desde el primer momento yo sabía que tenía que hacerles llegar el mensaje de Persistir siempre tanto a las jugadoras como al cuerpo técnico y es lo que he intentado en todo momento.  Hay que ser consciente que las temporadas son muy largas y que iba haber derrotas, sobre todo, en la segunda vuelta que los equipos se conocen más, los partidos fuera de casa son difíciles.

Hemos sabido levantarnos cada vez que había una derrota y lo hemos hecho en equipo. Gracias a persistir, creer y confiar en nosotras hemos tenido está constancia.

P: ¿Qué sintieron al proclamarse campeones una jornada antes de que se acabará al competición?

La palabra es liberación. Es cierto que al final las jugadoras y el cuerpo técnico teníamos muchas ganas de conseguir este objetivo tan bonito porque a nivel grupal es increíble y más con la dificultad que ha habido de por medio, las adversidades y todo lo que conlleva un camino tan largo, pero estábamos con confianza de que, aunque el camino fuese difícil, podíamos hacerlo posible y lo visualizábamos para no tener miedo a nada.

Queríamos conseguir el campeonato lo antes posible, pero sabíamos que si no éramos campeonas ante La Solana teníamos que ir con todo a Cáceres. Al final, el resultado del Levante – RUT nos favoreció y nos ayudó a llegar a la última jornada con el título en nuestro poder.

Estoy muy contento porque gracias a las derrotas y las adversidades, las jugadoras han adquirido madurez para afrontar la segunda vuelta

P: ¿Qué diría que es lo más difícil de gestionar en un vestuario de cantera que están en fase de aprendizaje?

En primer lugar, quiero agradecer la preocupación que ha tenido el club en querer ayudar al filial y en seguir progresando para que las cosas salieran bien en el primer equipo, en el B y en el C. Ha habido una ayuda y una comunicación en cadena que ha llevado a todos los equipos a seguir progresando como lo han hecho.

Somos un equipo joven y contra algunos equipos en el que hay jugadoras más experimentadas sufres ese grado de veteranía que a nosotras nos falta. Esto te hace aprender y madurar. Estoy muy contento porque gracias a las derrotas y las adversidades, las jugadoras han adquirido esa madurez que en la segunda vuelta ha demostrado en partidos muy complicados y los han solventado gracias al crecimiento que han tenido a lo largo de la temporada.

P: Durante el transcurso de la temporada han tenido algunas bajas y con ello les ha llegado la oportunidad a las chicas de la cantera, cómo entrenador ¿Considera que tener al C tan cerca es positivo para todos?

Poder contar con jugadoras de los equipos de la cantera es para nosotros muy bueno, pero también para ellas es un regalo porque saben que si se esfuerzan pueden llegar a competir al máximo nivel con nosotras. Además, este año haber tenido al C luchando por el ascenso ha hecho que el nivel haya sido más alto por lo que cuando han subido jugadoras del C o incluso del Juvenil A al equipo han podido dar un gran rendimiento porque es a lo que están acostumbradas con sus equipos.

Pasa lo mismo con las jugadoras que tienen ficha B, pero están en dinámica con el A. Les tengo que agradecer a todas ellas las veces que han ido con el equipo porque han dado el 100% y han ayudado en todo. Han sumado cada vez que han venido y las compañeras lo han agradecido.

P: En el último partido de liga, el Madrid CFF les hizo el pasillo como reconocimiento por la consecución del título de Campeonas y el ascenso, ¿Qué significó para ustedes?

Para mi es un detalle espectacular por parte del club y de las jugadoras del primer equipo y que se te queda grabado para siempre. Coincidimos con ellas todas las mañanas en la instalación, nos conocemos todos, está muy cercano el primer y el segundo equipo, relación directa entre jugadoras y cuerpos técnicos de ambos equipos, eso es muy importante.  Ver a las jugadoras del primer equipo como hicieron el pasillo con ilusión y a las del B saludando a la gente, saliendo en la televisión, sus familias orgullosas pasándoles los videos, esos segundos de felicidad, todo fue muy especial. Fue un reconocimiento a todo el trabajo que se ha hecho durante la temporada.

Ningún equipo te regala nada y en cada grupo hay mucha dificultad

P: Siempre se ha dicho que el Grupo Norte es más difícil que el Grupo Sur, usted como entrenador que ha podido conocer ambos grupos, ¿es mito o es la realidad?

Es igual de complicado tanto un grupo como el otro. Ningún equipo te regala nada. Es cierto que los equipos del norte tienen diferente cultura a los equipos del sur, pero son equipos muy competitivos.

La gente suele decir que el norte es más difícil que el sur porque en el norte suele haber equipos que en el fútbol masculino tienen un nombre y eso hace pensar que en el femenino es lo mismo. Pero, a ciencia cierta después de haber pasado por los dos grupos puedo decir que nadie te da nada y que las salidas tanto al norte como al sur, donde no se puede olvidar que hay que ir a las islas, son muy difíciles. Estoy seguro de que los dos grupos tiene una dificultad muy grande, no hay uno que se más fácil que el otro.

Este año se ha visto que en los dos grupos tanto el campeonato, los equipos de playoffs como los descensos se han decidido en las últimas jornadas. Además, tanto el campeón del norte como el sur han quedado casi con los mismos puntos.  Eso refleja que las cosas han sido equitativas a nivel de juego, a nivel de azar hasta el último momento.